Ascenso de los mares
El pronóstico de VoLo Foundation es compartido por otros análisis sobre la región que se han difundido en los últimos años. Uno de ellos, plasmado en el libro «Creciendo: mensajes desde la nueva costa americana» (2018), de la escritora, fotógrafa y joven educadora Elizabeth Rush, sostiene que el ascenso de los mares provocará la desaparición de ciudades, entre ellas Miami. Lo que Rush sugiere como novedad en su libro es que esto sucedería antes de lo que se cree. Y que el cambio será radical.
Mientras algunos políticos menosprecian la crecida de los mares como un fenómeno «incierto», dice Rush, el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático espera aproximadamente un suba 0,6 metros de altura para fines del siglo. Las Naciones Unidas predicen 0,9 metros. Y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica estima un límite superior de 1,9 metros, enumera la escritora en su libro.
Y propone un ejercicio: «Tome a los 6 millones de personas que viven en el sur de la Florida hoy y divídalos en dos grupos: los que viven a menos de seis pies y medio (2 metros) por encima de la línea de pleamar actual, y todos los demás. Los números se cortan casi por igual. Cara o cruz: arroje la moneda al aire. Si vives aquí, todo lo que puedes hacer es esperar que cuando eches raíces tu elección haya sido profética».
Por su parte, Henry Briceño, investigador de la Florida International University, asegura que Florida es el estado más vulnerable de Estados Unidos al cambio climático. La región parece tener todo en contra: las características de su suelo, compuesto por muchas cuevas y permeable, las extensas costas sobre el Atlántico de un lado, y el Golfo de México, del otro.
Según el experto, en los próximos años «va a haber tormentas más fuertes y más frecuentes, lo mismo que sequías más intensas y más extensas». De acuerdo con su pronóstico, para el 2050 el agua estará unos 30,5 centímetros arriba del nivel del mar y por «gravedad más del 60% de los canales no van a poder drenar el agua».